Universidades de Alemania, Chile y Ecuador impulsan construcción sostenible en Rumipamba

Ago 14, 2025

Con el objetivo de contar con un espacio adecuado para las actividades de sensibilización ambiental, se planificó la construcción de una edificación sostenible a través de una alianza entre universidades de tres países y el Fondo para la Protección del Agua.

Un equipo internacional de estudiantes y docentes de arquitectura construirá una infraestructura educativa en el Área de Conservación Hídrica – ACH – Rumipamba.

El proyecto, que combina sostenibilidad y educación ambiental, se levantará hasta septiembre de 2025.

El proyecto es liderado por la Facultad de Ciencias, Ingeniería y Construcción de la Universidad UTE, en colaboración con la Facultad de Arquitectura de la Pontificia Universidad Católica de Ibarra, la Universidad Católica de Chile y la Universidad de Wismar Alemania.

Estudiantes de estas instituciones desarrollaron propuestas en sus respectivas universidades, para luego integrarse en equipos internacionales y trabajar en un diseño conjunto.

Las propuestas fueron evaluadas por docentes y representantes del FONAG, seleccionando una alternativa final que será construida entre julio y septiembre de este año.

La propuesta arquitectónica combina funcionalidad y sostenibilidad a través de técnicas como el uso de bahareque, construcción con tierra y caña o madera, que tiene bajo impacto ambiental y alta eficiencia térmica; fachadas de acero y vidrio, y recubrimientos de madera.

El diseño busca integrarse de manera armónica al paisaje del páramo y ofrecer un espacio adecuado para talleres y experiencias educativas en torno a la conservación del agua.

Este trabajo colaborativo fue presentado en el Reto Global GC2025, un programa impulsado por la plataforma Architecture-in-Development (A–D), que apoya iniciativas arquitectónicas orientadas al desarrollo comunitario.

La propuesta fue seleccionada entre las 15 mejores de un total de 120 iniciativas a nivel mundial. 

El ACH Rumipamba es una zona estratégica de 250 hectáreas de bosque nativo y páramo en las faldas del volcán Ruco Pichincha, que aporta al abastecimiento de agua potable para aproximadamente 15.000 familias del Distrito Metropolitano de Quito.